A finales de los años 50’s Nissan se propone conquistar el mercado americano y para ello utiliza la marca Datsun para no estropear su imagen en caso de fracasar en ese mercado. Incursionó así en EEUU con una serie de autos deportivos llamados Fairlady (Hermosa Dama) que eran pequeños rodasters. Con el paso de los años estos modelos darían a luz a la legendaria linea Z que conocemos hoy en día.
Al inicio los Fairlady se parecían más a los Mg y Triumph de la época hasta que Datsun decide cambiar la estrategia y competir directamente con los Mustangs, Corvettes, E-types, Porsches, etc. Para lograrlo contratan al diseñador Albrecht Von Goetz que diseñó los hermosos BMW 503 y 507. Después de muchos años de trabajo finalmente en 1969, en el salón de Tokyo se presenta por primera vez el 240z y cautiva inmediatamente a toda la comunidad internacional. Desde entonces se convirtío en un auto récord de ventas. (Fue el deportivo mas vendido del mundo en esos años.) Quedó demostrado que los japoneses eran para entonces capaces de construir autos veloces, confiables, hermosos y asequibles.
Durante toda la década el Z es mejorado y en 1979 se lanza el 280zx llamado 2+2 Grand Luxury incorporando un asiento trasero mas grande, sistema de inyección Bosch L-jetronic SOHC, caja de 5 velocidades, motor 2800cc, 6 cilindros en línea, vidrios eléctricos, espejos eléctricos, asientos de cuero, aire acondicionado.
Este hermoso FairLady llegó al país nuevo de paquete en 1979 importado por vía aérea desde los EEUU para una FairLady ecuatoriana. “El auto fue un regalo que me hizo mi papá cuando estaba en la universidad y me lo dio por mi cumpleaños y por mis buenas notas. Para mi fue una sorpresa que no me esperaba jamás. Es un sueño que ha permenacido vigente por casi 40 años”.
La dueña del auto desde entonces ha estado siempre acompañada por esta hermosa máquina que ha sido su auto del diario desde entonces. Ella nos habla del auto como si hablara de un hijo y es muy notable que lo ha cuidado con todo el esmero posible. Es evidente que el auto muestra signos de uso, pero este se encuentra 100% funcional y en su estado original. No tiene nada de óxido y tan solo la tapicería de los asientos ha sido restaurada. Lleva todavía los aros estilo Cromodora tan característicos de la época.
El diseño exterior del Z es una obra de arte y captura lo mejor del automovilismo de la época. Los faros hendidos, similares al E-type, la figura larga y diseño del capó de los Muscle Cars y la cola corta de los autos italianos, le dan al vehículo un diseño vigente y atemporal.
Ya en el interior, el auto es todo lo contrario: sencillo, simple y en cierta forma un poco aburrido. Destacan los switch de vidrios eléctricos y los instrumentos colocados en la mitad del panel. El radio cassettera Hitachi es un tesoro por su estado original e impecable de funcionamiento.
Su dueña nos cuenta además que el 280zx fue y ha sido un auto llamativo, que robó miradas siempre. Fue muy inusual en nuestro medio encontrarse a una mujer en esa época manejando un deportivo y lo es aún ahora. “Una vez al salir de clases en la Universidad me encontré un ramo de flores que me dejaron en el auto, con una nota que decía: Para esta preciosidad. Nunca supe quién la dejó.
La propietaria del auto nos comenta que en los últimos años la gente se acerca mucho a felicitarle y preguntarle si el Datsun está de venta. La respuesta siempre fue que no! Pero ahora su dueña lo está reconsiderando porque aunque le duele desprenderse de su fiel amigo y compañero, ella nos confiesa que cree que llegó el momento de dejarlo ir. Es un miembro de la familia que tendrá que encontrar alguien que lo quiera, valore y tenga el tiempo y cariño para mantenerlo igual. (Tribumotor se ha comprometido a ayudarle a buscarle un nuevo dueño, seguro no faltarán padres o madres que amen a este cachorro).
Un auto que es parte de la historia automotriz mundial y de nuestro país y que merecía estar en Tribumotor, contenido 100% producido en Ecuador.