A lo largo de su historia SAAB tuvo quizás mas errores que aciertos. Pero cuando los ingenieros acertaron, lo hicieron de manera brillante. Una de las mejores máquinas de las últimas décadas el SAAB 99 turbo, considerado un verdadero unicornio que fue el primer auto de serie con turbo cargador. Para actualizar al 99 se presentó el 900 turbo que sorprendió por su excelente construcción y mejoras en seguridad.
Tribumotor te trae este hermoso y excéntrico Saab 900 turbo cabrio que al parecer es el único que existe en el país y que representa a toda una generación de jóvenes que buscaban cambiar el mundo. A pesar de que aún no tiene los 35 años de rigor que necesita un auto para considerarse clásico, al desaparecer Saab los expertos al rededor del mundo ya lo consideran el último clásico de la marca ya que después General Motors asumió el control del gigante sueco y nada volvió a ser igual.
Para definir al Saab 900 Turbo hay que definir a toda una generación de los años 90s considerada como Hipster. Jóvenes, bohemios de clase media alta, con educación de tercer nivel, música indie, amantes de la cultura alternativa y de la estética vintage. Eso es el Saab900, un auto alternativo de finales de siglo XX en el que los cabrios de lujo estaban restringidos solo para quienes eran poseedores de una jugosa cuenta bancaria.
El 900 sin duda alguna es un auto diferente porque no luce moderno, tampoco aerodinámico, es un coupe pero tiene el tamaño y espacio de un sedán pequeño. No luce lujoso, pero tiene absolutamente todas las comodidades de un auto de lujo: vidrios, espejos eléctricos, asientos en cuero calefaccionados, capota eléctrica, vidrio trasero incrustado en la lona con desempañador, plumas de faros, airbags, abs, etc. Nadie puede discutir que es original por dónde se lo mire.
El dueño de este SAAB único en el país nos comenta que el auto le pertenecía al padre de un buen amigo en Cuenca y que cuando lo vio por primera vez le gustó muchísimo y le pidió que si algún día lo iba a vender le avise. Poco tiempo después recibió la llamada: “Decidieron hacer unas obras de construcción en el espacio donde tenía guardado el auto, necesitaban el espacio y mi amigo me llamó. Probé el auto y desde la primera vez que me subi lo que me alucinó es la patada del turbo. Es una sensación de potencia increíble, cuando entra el turbo es una flecha.” Nos comenta Diego.
Este 900 de 1992 versión americana trae un motor de 2.000 centímetros cúbicos, 4 cilindros en línea, 16 válvulas, caja de 5 marchas con tracción delantera, turbocharger con inyección indirecta, discos ventilados.
En el interior el auto es sobrio y bastante sencillo. Destacan los instrumentos VDO con tacómetro colocado al lado izquierdo, algo bastante inusual. Los instrumentos del turbo al lado derecho y switch de encendido que no ha sido colocado junto al volante sino junto al freno de mano.
Nos comenta Diego que gracias al 900 turbo creció su amor por la marca Saab y todo el encanto que rodea al fabricante sueco. “Hace un par de años compré un Saab 96 de 1967, un abuelo para que le haga compañía. Sin embargo, salir a dar una vuelta en una tarde de sol en el cabrio es algo muy agradable. Llama mucho la atención y atrae muchas miradas, todos piensan que es una rareza. La razón por la que lo compré y lo pienso conservar es porque es un clásico en potencia día a día se vuelve más especial y codiciado en el mundo. Le tengo mucho cariño.”Este auto único en nuestro país es la clara muestra de que Saab sabía hacer las cosas muy bien y que siempre pensaba en la innovación de sus autos. El 900 es sin duda un auto sólido que sin ser pretencioso enamora. Un auto que merecía estar en la primera entrega de 2018. Tribumotor, contenido 100% producido en Ecuador.